El Sol brillando en lo alto del cielo azul, la espuma blanca de las olas chocando contra el acantilado oscuro y brillante… respiras el yodo marino y te dispones a extender tu toalla en la arena verde… ¿En la arena verde?
Sí, sí. En la arena verde. ¿Te parece raro? ¿Acaso esperabas la arena dorada de toda la vida? Pues no te sorprendas todavía, porque hay playas verdes, rojas, negras, naranjas… La naturaleza es caprichosa y su gama de colores bastante amplia, así que, para que te hagas una idea, a continuación te presentamos 5 playas de colores que romperán con todos tus esquemas.
La Playa Verde de Mahana, Hawaii
La Playa Mahana, también conocida como Playa Papakolea, es una de las pocas playas del mundo cuya arena muestra esta tonalidad verdosa. Esta coloración se debe a la alta presencia de olivino (un mineral semiprecioso) y de basalto, procedentes de las erupciones del volcán a cuyos pies se encuentra la playa, y que le confieren este tono verde oliva.
Encontrar esta playa de arena verde no resulta sencillo, ya que se encuentra en la base del volcán Pu-u Mahana, un volcán situado en el extremo meridional de la isla más grande del archipiélago de Hawaii, próximo a South Point. Para llegar, tendrás que dejar el coche en Kaluana y atravesar a pie unos cinco kilómetros de áridos campos de lava desde la carretera hasta la playa. El trayecto no es fácil, pero la recompensa que ofrece el paisaje resulta increíble.
La costa roja Red Sands Shore, el Marte de Canadá
La isla canadiense Príncipe Eduardo alberga una de las costas más coloridas del mundo; la zona conocida como Red Sands Shore, al sur de la isla.
Las playas y acantilados de esta costa son famosos por sus tonos rojizos, resultado de la alta concentración de mineral de hierro en la composición de las rocas y de la arena. En estas playas podrás pasear, explorar la zona, avistar aves o buscar moluscos excavando en la arena. Lo que no te recomendamos es que entres en el agua, no solo por el frío canadiense, sino porque en esta costa el mar suele batir con fuerza contra las rocas y puede resultar peligroso. Mejor quédate en tierra y toma unas preciosas fotos.
La arena violeta de Pfeiffer Beach, California
La Playa Pfeiffer es una hermosa playa situada en la zona del Parque Natural Pfeiffer Big Sur, en la costa oeste de California. Esta playa destaca por el color morado de sus arenas, cuya tonalidad, que varía según la luz creando impresionantes reflejos, se debe a presencias elevadas de manganeso y granate.
Esta playa es muy popular entre los amantes del surf por sus olas, ideales para practicar deportes acuáticos de este tipo. Es además una playa frecuentada por nudistas, ya que ofrece un espacio tranquilo y natural donde pasear, leer o, simplemente, disfrutar del paisaje.
La impresionante arena naranja de la Playa de Xi, en Grecia
Grecia es conocida por sus hermosas playas mediterráneas, aunque la Playa de Xi, en Zefalonia, llama la atención de los más curiosos por el intenso color naranja de su fina arena. Este color peculiar se debe a la alta concentración de arcilla, por lo que, además, resulta ideal para aplicarte una buena mascarilla… ¡y para conseguir unos sólidos castillos de arena!
La Playa de Xi se encuentra en una zona de fácil acceso y aguas tranquilas, lo que la convierte en el destino perfecto para familias y para amantes de los deportes acuáticos que buscan practicar snorkel o jet ski. Además, en la zona encontrarás chiringuitos y un pequeño mercadillo, por lo que la diversión está asegurada.
Playa Punaluu, una salvaje playa de arena negra en Hawaii
La Playa de Punaluu se encuentra en el sudeste de Isla de Hawaii, en la Bahía de Punaluu. El color negro brillante de su arena se debe a la presencia de basalto, dado el origen volcánico del archipiélago, motivo por el cual es posible encontrar numerosas playas de arena negra en Hawaii. Esta es una de las más representativas por su paisaje único. Sin embargo, es una playa salvaje, por lo que las fuertes corrientes no hacen recomendable adentrarse en el mar.
A modo de curiosidad, cuentan las leyendas locales que un río subterráneo fluye bajo la arena negra de Playa Punaluu, y que antiguamente, en tiempos de sequía, los habitantes buceaban en busca de la desembocadura del río para llenar sus recipientes de agua dulce. Si tienes sed, ni lo intentes, es más seguro recurrir al botellín de agua.
Estamos seguros de que te gustaría conocer todas estas playas… pero, poco a poco. ¿Por cuál prefieres empezar? ¿Playas verdes, rojas, naranjas…? Elige tu primer destino para este agosto y reserva tu viaje a medida. ¡Y no te olvides de traer un frasquito lleno de arena! Con el tiempo podrás acabar reuniendo una colección de lo más singular.